Oración Judía
“Soy una criatura de Dios y mi vecino es igualmente su criatura; mi trabajo está en la ciudad y el suyo está en los campos; voy muy de mañana a mi trabajo como él va al suyo.
Quizás diréis que hago grandes cosas y él cosas pequeñas.
Hemos aprendido que poco importa que lo que uno hace sea grande o pequeño siempre que dirija su corazón hacia el cielo” (Talmud)