Mujer y compañera de camino, mira cómo estamos…
Míranos, Madre, tan liados, tan cerrados, tan atados, tan poco libres.
Míranos, María, tan liados, tan enfrentados, tan solos en el fondo de nuestras batallas mutuas.
Míranos Tú, compañera de camino, tan liados, tan cansados, tan perdidos, tan necesitados de luz y claridad.
María de Nazaret, María Inmaculada,
Tú que nos haces fácil el camino,
Mira este nudo en el estómago que te traigo y no sé cómo deshacer.
En tus manos de madre lo pongo. En tu corazón de madre. En tu mirada de madre.
Para que Tú me pongas con tu Hijo, ahora y siempre.
.